jueves, 21 de diciembre de 2017

YA ES NAVIDAD!!!!

Como cada año, se aproximan esas fechas que a mi tanto me gustan, y que al mismo tiempo generan gran debate, porque tienen defensores y detractores, aunque curiosamente, entre los mismos defensores de los que soy la presidenta del club de fans y también entre los detractores no se ponen de acuerdo para indicar los motivos por los que están a favor o en contra de las fiestas.
Yo tengo mis razones particulares, y no va a haber quien me baje de la burra, porque tengo claro clarísimo que cuanto más tiempo pasa más cargada estoy de motivos para celebrar las Navidades con todos los que me rodean, al menos con todos los que pueda, que las circunstancias van cambiando, las familias crecen por un lado mientras que disminuyen por otro, lo normal…
! Ley de vida!
Que el origen es el origen, y lo que se celebra es una fiesta por el nacimiento de Jesús, es algo que tiene especial simbología para todos los cristianos. Luego está el tema de los menos adeptos a temas religiosos pero que tampoco reniegan de ese origen, y su motivación principal es que es una fiesta de paz en torno a las familias.
 Sea como fuere,se mire por donde se mire, el objetivo que mas mueve a la gente a celebrar la Natividad de Jesús es la reunión familiar y de amigos y los buenos deseos, la solidaridad para con los menos favorecidos se ve en estos días más a menudo, estamos más receptivos a los buenos sentimientos.
Los detractores…Uff, me da pereza hablar de ellos, porque creo que ya he dicho en ocasiones que puedo rebatirles sus razones una a una, pero cara a cara, pero si voy a decir a aquellos que dicen que “hay que ser solidarios siempre, no solo en Navidad”, tienen mucha razón, pero si al menos en estos días nos enternecemos, ya habernos conseguido algo. Esto también vale para los de “cualquier día se puede celebrar una comida familiar y no hay que esperar a Nochebuena”
¡Efectivamente!, y de hecho  se hace, pero tienen distintos significados, cumpleaños, compromisos, bodas, graduaciones…etc
Este año, me voy a enfrentar a unas Navidades extrañas.
Cuando acaben os contare la experiencia, pero acostumbrada a tenerlo todo bajo control, y llevar casi un mes sin andar…
¡Y lo que queda!
Aun así, la ilusión, no ha mermado un ápice.
He recordado algo que decían las monjitas de Cottolengo, “Dios proveerá”, pues eso digo yo, alguien solucionara las cosas, que todos somos perfectamente sustituibles.
Deseando que llegue ya el sábado para ultimar preparativos.
Y para terminar…
Respecto a los que echan de menos a gente…pedirle que  no pierdan el tiempo y disfruten ahora de todos los que tienen a su lado que nadie sabe a cuantos más van a echar de menos el próximo año, y se habrán perdido la ocasión de hacerlo ahora.
¡!!Feliz Navidad a todos!!!!!







sábado, 2 de diciembre de 2017

El Umbral Del Dolor

Siempre se lo oí decir a las personas mayores
 Y después lo empecé a  repetir cuando ya entendí  lo que en realidad significaba, que además de aquello de que   “Dios aprieta pero no ahoga” había otro dicho que era mucho más profundo, mas lleno de resignación y es aquel que decía…
“Que no nos mande todo lo que somos capaces de soportar”
Ese que te decían cuando ya estabas a límite y decías que no aguantabas más

Cuantos no hemos padecido o visto padecer de cerca a personas a las que les vienen maldadas, una tras otra, sin piedad, y de todo tipo y piensas, si no eres tu “la victima”  en ese caso, yo no aguantaría y ….hasta que te toca …

Que a veces te toca
Y más que comprobado.
 Las razones por las que soportas son innumerables y cada cual tiene las suyas, que no tienen que ser las mismas que las de otro, necesariamente. Las circunstancias te pueden llevar a soportar cosas que ni por ensoñación pensaste que fuera posible.
Los  dolores del alma minan la salud del que los padece y  a veces hacen sentir a quien está en esa situación que el mundo se hunde, pero se acaba saliendo a flote por aquello del dicho del que antes hablaba.
En cuanto al dolor físico propiamente dicho, tiene mucho que ver en donde está situado nuestro umbral del dolor.
Todos no tenemos el mismo aguante, Y a veces son las circunstancias las que te elevan ese umbral, hay momentos  que no aguantarías  si las cosas cambian.
A menudo me han ocurrido  cosas, bastante a menudo, diría yo, y lo he sobrellevado como he ido pudiendo, unas veces con más paciencia que otras.

Soy lo menos parecido a un héroe.

 Siempre tuve claro que tenía bastante alto , a pesar de ser llorona y un poco pusilánime y bastante sensible , el umbral del dolor, por una serie de valores que antepongo a mi propio sufrimiento
 Y pude comprobarlo el domingo pasado

Esas pequeñas cosas De vez en cuando la vida, te dá palos y te compensa a la vez, estoy convencida de que siempre encuentra algo para equil...