Papá.

Hay fechas que tienen un significado para mucha gente y otras  que solo importan algo para algunas  personas. De la misma forma que existen días señalados que para millones de personas son un recuerdo de importancia relevante y ese mismo día para alguien es el detonante de un cambio  demasiado primordial en sus vidas.

Eso ocurre en mi casa con el día de hoy.

Hace 38 años el mundo se paraba un poco sobre esta hora y apenas  nadie se atrevía a toser  ni respirar, y  nosotros sin saberlo, estábamos disfrutando de lo que fueron las últimas horas de vida de mi padre, al mismo tiempo que comentábamos con él los últimos acontecimientos y nos ponía sobre aviso de todo lo que podía ocurrir  dependiendo del éxito o fracaso de los acontecimientos que estaban ocurriendo ,ya que no teníamos mucha, ni  siquiera poca ,información de cómo funcionaban estas cosas mientras que  sin embargo él ,que había vivido una guerra  que lo dejó huérfano y como supe después ,sin las pertenencias de sus padres a los 11 años y  a pesar de las circunstancias, se había tomado el trabajo de informarse un poco, a la sombra siempre, en silencio, de la misma manera que se formó en literatura, geografía e historia, además de matemáticas de forma autodidacta, años después de su desaparición, tuvimos conocimientos de forma indirecta de como vivió sus primeros años, de los que nunca quiso decir ni palabra y siempre respetamos.

 Recuerdo ahora mismo, como me llevaba a un rincón de la trastienda, donde se apilaban aquellos cartuchos de papel que se usaban para envolver los garbanzos y el azúcar, las lentejas y el arroz que entonces se vendían a granel y allí tenia amontonado aquellos libros,  libros variopintos, de cultura general, que eran bastante usados en aquella época por la gente que no tuvo acceso fácil a la escuela y que usaba en los ratos libres que el negocio le dejaba y nunca dejó de instruirse.
 Llegó a  ayudarme a mí  con mis deberes cuando ya estudiaba bachillerato y me iba a la tienda por las tardes  y en aquella camillina que había me ponía a adelantar las tareas.

Hoy se me amontonan en mi cabeza, infinidad de recuerdos,  todos los momentos de aquel día y  de otros muchos días y a Él lo veo a mi lado , enseñándome siempre, de todo, de la vida, del campo, de sus conocimientos, empecé a amar la geografía de oírlo hablar a él, de la pasión que ponía al contar cosas, de su tierra , de la tierra de sus antepasados, de donde hizo la mili, recuerdo algunas frases suyas como si me las hubiera dicho ayer.

Y pasaron ya 38 años de aquel día que para muchos fue un triunfo de la democracia al no funcionar el golpe de estado y para otros … fue el día en que conocíamos el inmenso dolor de perder a un padre, en un momento…

¡Tan joven!, con tanto por vivir… Con tantas cosas por enseñarnos…

Nunca me cansaré de hablar de ti, de escribir sobre ti.

Te pienso mucho papá, no solo en aniversarios  señalados.

Sigues siendo junto a mama nuestro tema preferido de conversación
Papá…¡Te queremos!